Saber la respuesta correcta, ¿Es suficiente?

Authors

  • Carmen Sforza Coordinadora Instituto Catalisador

DOI:

https://doi.org/10.47966/avan-inv.2021.8179-88

Abstract

Este texto coloca en cuestión si en este mundo de calificaciones y exámenes de alto impacto los ambientes educativos no acaban alentando a los estudiantes a complacer al profesor y al sistema, y sobre la importancia de crear un equilibrio saludable en la relación estudiante-profesor, que a su vez genere las condiciones para que los estudiantes tomen un rol activo en su proceso de aprendizaje, algo crucial para estos nuevos tiempos donde el enseñar a aprender es una nueva lógica que necesita instalarse. A partir de diversos autores se discute que el hacer por hacer no conduce intelectualmente a ninguna parte y que si ningún objetivo intelectual orientador o prioridades claras estructuran la experiencia de aprendizaje los estudiantes acaban intentando involucrarse y seguir la clase de la mejor manera posible, esperando que el significado emerja. Se plantea además que la adopción de un rol activo en el proceso de aprendizaje va a depender del deseo de aprender de los estudiantes, y de su percepción en relación con su capacidad de aprender, muchas veces condicionada por la mirada del profesor y de sus expectativas. Se sostiene que los estudiantes necesitan tomar un rol activo en su proceso de aprendizaje, a partir de propuestas educativas que les permitan ser protagonistas, mediante situaciones prácticas, producciones individuales y en grupo, y sistemizaciones progresivas, en una propuesta compartida de forma clara con los estudiantes, planteadas como un medio para un fin educativo.

Published

2021-12-21